Lactancia y trabajo ¿cómo compaginar? 6 claves hacia el éxito.

Uno de los principales quebraderos de cabeza de algunas mamás después de dar a luz es ¿cómo voy a compaginar la lactancia con mi puesto de trabajo?

Lo primero de todo debes mantener la calma. Todo tiene solución. Lo segundo es decidir si quieres continuar con la lactancia.

Es conocido por todos, los beneficios de la lactancia materna pero a pesar de ello debes ser tú mamá, quien decida si deseas dar o no el pecho y cuánto tiempo deseas hacerlo.

Dicho esto te proporcionamos estos consejos para que puedas compaginar el trabajo y la lactancia, sin estrés.

  1. Tener bien establecida la lactancia materna. A veces, sobre todo las trabajadoras que lo hacen por cuenta propia deben incorporarse a sus puestos de trabajo tras sólo 6 semanas de descanso,       que es el mínimo exigido. Si deseas seguir con el proceso de lactancia materna deberás haber establecido perfectamente este proceso, si no, demasiado horas fuera de casa podrían provocar la insaciabilidad de tu bebé y/o la falta de producción de leche.
  2. Pedir ayuda e información siempre que haga falta. No te sientas mal por necesitar información, por tener dudas, por querer contrastar información. Pregunta siempre que necesites a profesionales (matronas, pediatras…).
  3. Hacerte con un sacaleches o extractor de leche. O tienes una flexibilidad brutal en el trabajo, en el que pueden traer a tu bebé cada 2-3 horas (lo que necesite) para darle pecho o deberás extraer la leche para que la persona que se quede con el bebé pueda seguir dándole tu leche. Evidentemente puedes comenzar a introducir la lactancia mixta o, según recomendaciones de su pediatra, la introducción de otros alimentos con los que puedas jugar tus ausencias en casa.
  4. Una vez que vuelvas del trabajo, reestablece la lactancia materna a demanda del bebé. Seguro que tu bebé está más rato del debido pegado a tu pecho. No sólo será hambre. Necesitará sentir tu contacto. No tengas prisa por hacer otras tareas. Tómate tu tiempo; respeta su tiempo.
  5. Si no dispones de otras personas del entorno para que se quede con el bebé (abuelos, padre, tíos…) contrata a alguien que se quede en casa con él o clarifica este punto en la guardería. Generalmente, por políticas de higiene y seguridad ofrecerán a tu bebé leche de fórmula. La leche materna tiene unas condiciones de mantenimiento más delicadas que la de fórmula. Una persona contrata por ti, en tu casa, podrá ofrecerle a tu bebé la leche que extraigas.
  6. No te alteres ni estreses. Aunque no lo creas existen estudios que demuestran que el estrés puede estar ligado con la cantidad y calidad en la producción de leche.

Volver al trabajo supone un cambio importante. Una mezcla de sensaciones y emociones pero tienes que mantener la calma. En muchas ocasiones las mamás quieren volver al trabajo para tener un cierto tiempo para ellas, aunque sea en el lugar de trabajo.

Debes tener también, por lo menos, la información que para atender a las necesidades que se puedan presentar, tienes derecho a una reducción de jornada o a disponer de un periodo de excedencia, manteniendo a la vuelta empleo y/o sueldo.

Si estás barajando esta opción quizá quieras darte una vuelta por nuestro post sobre conciliación 

Una cosa ha de quedarte clara: tú eres quien debe decidir qué hacer y cuándo hacerlo. Puedes pedir consejo, ayuda, información pero la decisión es tuya.

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Esperamos haberte despejado dudas o haberte generado nuevos interrogantes.

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